UC - Críticas
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EL SILENCIO DE LOS CORDEROS
"Los Hombres que Miraban Fijamente a las Cabras" es una comedia disparatada y con tintes surrealistas de original título y divertido planteamiento con un reparto lleno de estrellas entre las que se encuentran George Clooney, Jeff Bridges, Ewan McGregor o Kevin Spacey. Una película con mensaje anti-bélico llena de ironía y que nos llega avalada por algunas buenas críticas.
Bob Wilton es un reportero que decide involucrarse en un conflicto bélico con el objetivo principal de olvidar su fallido matrimonio. Sus expectativas se ven superadas al encontrarse con un agente especial de las fuerzas armadas estadounidenses, Lyn Cassady, que le revela la existencia de un programa militar secreto que terminará con el concepto de guerra tal como lo conocemos actualmente. Se trata de un grupo de militares que, gracias a sus poderes psíquicos, pueden leer los pensamientos del enemigo, atravesar paredes e incluso matar a una cabra simplemente mirándola fijamente. Cautivado por las historias exageradas que le cuenta Cassady, decide seguirle, aventurándose en una experiencia que jamás olvidará.
El resultado no es del todo satisfactorio. Y es que el tono de comedia surrealista al estilo del cine de los Hermanos Coen se desinfla a la media hora debido a un ritmo intermitente y un guión que desaprovecha la comicidad de muchas situaciones. Tampoco acaba de funcionar el tono de sarcasmo y denuncia bélica que toma el relato por resultar en exceso inofensivo y dentro de un contexto poco realista, en este sentido resultaba mucho más inteligente otra película desmitificadora de la Guerra de Irak que compartía humor y actor protagonista titulada "Tres Reyes" y que sabía conjugar mejor todos sus elementos.
Es de agradecer, sin embargo, la presencia del sólido reparto que encabezan actores de la talla de Clooney, McGregor, Bridges y Spacey, que se nota que se lo pasaron en grande durante el rodaje y que cumplen funcionalmente con sus personajes, dando un plus de interés al producto que con otro reparto carecería. Y es que "Los Hombres que Miraban Fijamente a las Cabras" acaba por convertirse en un entretenimiento más banal de lo que pretende y del que lo más recordable será su título.
